Una caricia a la ciudad. 2018

Una caricia a la ciudad es una propuesta de acción y mapeo afectivo del territorio, a través de prácticas relacionales. Establece rutas de recorridos a partir de estrategias y herramientas de cuidado individual y colectivo, propone formas de habitar y de observar los lugares cotidianos y los afectos en la ciudades.


Este proyecto es la continuidad de una investigación alrededor de la ternura como eje transversal para generar formas no violentas de relacionarnos.

Recorrido 1
NAVE. 30 Junio 2018
Santiago. Chile


Una caricia a la ciudad se activó por primera vez en el marco de Movimiento Sur, Plataforma de encuentro
y creación escénica contemporánea. Busca generar estrategias para habitar un territorio desde los
afectos. Este primer recorrido se hizo con los participantes de Movimiento Sur y los asistentes a la
muestra de procesos.


La cita era en la entrada de NAVE, y las instrucciones fueron las siguientes:

1. Hacer un recorrido de NAVE a la Plaza Yungay.


2. Se puede caminar  de cualquier lado de la acera.


3. Ir atentxs al grupo.


4. Cualquier miembro del grupo puede detenerse en el momento que quiera en el trayecto a la plaza.


5. Todxs lxs participantes deben detenerse cuando alguien para. La duración de la pausa es

voluntaria, pero por un momento deben estar todxs detenidxs.

6. Llegando a plaza Yungay, encontrarán algunas sugerencias de acciones. Pueden realizarlas o no.


En la plaza había cuatro personas con una pancarta cada una:

1. Aquí se baila.

2. Te invito a caminar en círculos.
3. Aquí se cuentan historias.
4. Te invito a imaginar cosas.


De la experiencia:
La experiencia colectiva de la pausa, genera encuentros inesperados con otrxs y con el espacio y la
ciudad.

No había una indicación para guardar silencio, así que a veces las conversaciones distraían la atención de lo que sucedía en el trayecto.


Las pancartas hacían una referencia a la ocupación del espacio y la protesta. (No me parece que esto fuera parte del proyecto, y de inicio no era parte de la propuesta)


Las acciones se activaron con lxs participantes, pero no invitaban a quienes ya se encontraban en la plaza.


Observaciones:
  • Cuando un grupo de personas llega a un espacio, y acciona de manera colectiva, interviene inevitablemente ese espacio.
  • Una caricia a la ciudad, puede también ser una herida a la ciudad. La presencia de un grupo de personas, puede resultar violento para otrxs que habitan de manera cotidiana un lugar específico.


Preguntas:
1. ¿Tiene sentido en términos de “una caricia a la ciudad” plantear experiencias de este tipo
entre personas ajenas al lugar (a la plaza, en este caso?

2. ¿Cómo negociar las figuras de “extranjero”, “turista”, “local”, “habitante”?


3.¿Es posible generar afectos temporales a través de experiencias efímeras en los espacios?










Recorrido 2


La Piedra Feliz. 5 julio 2018
Valparaíso. Chile

Parte 1.
Encuentro con César.

Rolando me presentó a César vía Whatsapp, César y yo agendamos una cita para pasear por
Valparaíso el miércoles 4 de julio.Caminamos por casi tres horas. Él me mostró el sector de Playa
Ancha, la plaza Wadington. Me contó algunas de sus historias de niño / adolescente, me llevó a la
Piedra Feliz.

Hicimos un breve paso por cerro Alegre y cerro Concepción (demasiado turísticos para su gusto) y

finalmente cenamos empanadas de camarón con queso y mariscos.

Mientras bajábamos de la Piedra Feliz, decidí que era un lugar y una historia para compartir con otrxs.


Parte 2.
Paseo con invitadxs.
César no podía acompañarnos, así que le pedí permiso para contar su historia como mía. Aceptó.

Cité a lxs participantes de Movimiento Sur el viernes a las 17:00 para un paseo de una hora.
¨Subimos¨ en bus porque teníamos poco tiempo.

Las instrucciones eran:

1. Hacer el recorrido en el mayor silencio posible.

2. Dibujar la experiencia (durante o después del recorrido).


Caminamos unos 10 / 15 minutos para llegar a la Piedra.


Cuando llegamos a la Piedra, conté algunas de las anécdotas que César había compartido conmigo.


Observaciones:
1. A partir de la relación entre local - extranjero, emergen miradas y spots sobre los lugares,
que difícilmente aparecen entre quienes transitan cotidianamente los espacios.
2. ¨Mi ciudad es más mía cuando la comparto con otrxs¨.
3. Es importante tomarse el tiempo para los recorridos. En la lentitud de la caminata se activan
miradas y experiencias sensibles sobre los paisajes.
4. El silencio es importante para la experiencia. Los sentidos se disponen de otra manera.

Preguntas:
1. ¿Qué posibilidades ofrece apropiarse y contar la historia de otrxs como propia?
2. ¿Cómo se construye la relación con el contexto a través de sus habitantes?
3. ¿Qué acciones podrían caber además de contar historias en los espacios?




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